Informe Ejecutivo sobre Foro Internacional dedicado a la desinformación online y la democracia

13 de Junio del 2021

El 28 de mayo de 2021 se llevó a cabo vía Zoom el Foro Internacional “La desinformación online y su impacto en la democracia” en el marco del Ciclo Electoral Democracia Digital 2021 - Segunda Vuelta, organizado por D&D Internacional - Democracia Digital y el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), con el auspicio de National Democratic Institute (NDI) y Google.

El Foro Internacional contó con la participación de destacados expertos nacionales e internacionales, ellos son: Elaine Ford, directora fundadora de D&D Internacional - Democracia Digital; José Luis Salas Arenas, presidente del Jurado Nacional de Elecciones; Janett Talavera, asesora presidencial del JNE; Francisco Herrero, director de National Democratic Institute - Colombia; Ernesto Fernández Polcuch, representante de UNESCO en el Perú; Carmen Moreno, especialista en comunicación e información de UNESCO en el Perú; Cristina Tardáguila, directora de la Agencia Lupa (Brasil) y; María José Lira, coordinadora de Investigación de Hiperderecho.

Dicho evento tuvo como objetivo analizar el efecto de la desinformación online y mostrar los esfuerzos desplegados por cada uno de las instituciones participantes durante la segunda vuelta electoral en el país, en donde el clima hostil en las distintas redes sociales se ha agudizado debido al escenario polarizado que se vive. Además, el evento virtual de más de dos horas de duración, invitó al análisis y a la reflexión sobre el efecto adverso que la propagación de falsedades y mentiras puede ocasionar en los cimientos democráticos.

El evento comenzó con la intervención de Elaine Ford quien resaltó que en las últimas semanas se ha notado una mayor presencia de desinformación y que ésta viene acompañada de noticias falsas, maquinarias de trolls, bots y cuentas falsas que permiten que contenido engañoso llegue a viralizarse. Esto trae consigo efectos adversos: traicionan la verdad, manipulan al individuo, incitan el odio con mensajes hostiles y difamatorios, deslegitiman a las autoridades y con ello se agudiza la incertidumbre y resquebraja la débil democracia peruana. Asimismo, señaló que en el ámbito político en contextos electorales se suele evidenciar una lucha de poderes en donde todo es permitido y no hay una autorregulación por parte de los políticos. En ese sentido, Elaine Ford afirmó que es necesario que la autorregulación provenga de los diversos actores políticos para así evitar la censura a la información o advertencia sobre los contenidos.

En esa misma línea comentó que la desinformación presenta ciertos matices. No todo es blanco o negro. Además de “verdadero” o “falso”, también existan las siguientes clasificaciones: “impreciso”, “insostenible”, “exagerado”, “contradictorio” y “distorsionado”. De esta manera, es importante diferenciar entre estos matices para poder entender las intenciones detrás de la propagación de la desinformación. Otro aspecto a tomar en cuenta es la construcción de filtros burbuja y la tendencia a la tribalización. Esto es, interactuar solo con aquellos que tienen líneas de pensamiento similares. Asimismo, se puede notar un gran nivel de narcisismo por parte de los nuevos “influencers políticos” quienes muchas veces creen que sus ideas son verdades absolutas, impidiendo así, el espacio al diálogo.

Estos niveles de desinfodemia son combatidos desde distintos frentes, señala Ford. Por un lado, las corporaciones y las big tech han realizado esfuerzos para combatir la desinformación. Por ejemplo, Facebook posibilita la degradación de una publicación falsa a través de la penalización en el algoritmo de la red social impidiendo su circulación. Además, de manera previa realizan una verificación de contenido con los medios locales con el objetivo de evitar la censura. Asimismo, otras compañías como Google y Twitter han realizado esfuerzos para combatir este problema. Es necesario seguir exigiendo mayores esfuerzos no solo a estas grandes compañías, sino a todos los ciudadanos que tenemos algo que aportar.

Por otro lado, José Luis Salas Arenas comenzó su intervención con la pregunta ¿Cuál es el rol que deben tomar las instituciones y en especial el Jurado Nacional de Elecciones ante la desinformación que se presencia actualmente en un contexto electoral? Como uno de los esfuerzos realizados por el JNE surge el Comité Técnico de Fact Checking. Este sería el primer comité de este tipo en una institución pública. Asimismo, señaló que la desinformación no es solo un problema individual, sino que es de interés público.

En esa misma línea, Janett Talavera comentó acerca de la campaña que se viene realizando desde el Comité de Fact Checking del JNE. El objetivo general de este comité es combatir la desinformación a través de redes sociales sobre diversos temas electorales que distorsionan la realidad. Para ello, han realizado un flujograma con un límite de tiempo para responder acerca del carácter de una noticia que puede ser considerada falsa o engañosa. Así también, reconoció la labor que vienen realizando iniciativas como Amallulla y Perú Check para frenar la desinformación e instó a otras instituciones públicas a realizar iniciativas similares.

Por su lado, Francisco Herrero señaló que las elecciones se pueden entender a partir de tres principios: proceso competitivo, confianza en las instituciones electorales y que la participación de los ciudadanos sea informada. En ese sentido, la desinformación exacerba el daño al proceso político electoral. Ante esto, Herrero señaló que las organizaciones e iniciativas que combaten la desinformación deben ayudar a motivar a las personas de manera individual y colectiva para sumarnos a la lucha contra la desinformación en este proceso electoral y también de manera permanente.

Por otra parte, Cristina Tardáguila inició su intervención con la definición del término “tecnopopulista”. Este término hace referencia a las personas que conocen el funcionamiento de los algoritmos de las redes sociales para mover la discusión hacia donde les interesa. Usualmente tienen un carácter agresivo con la prensa y no les interesa la reputación de entidades electorales. Asimismo, señaló que como parte de las narrativas que suelen usar en contextos electorales desconocen los resultados y afirman la existencia de fraude electoral a través de fotos y videos alterados. Además, comentó acerca de la experiencia electoral en Brasil con respecto a la desinformación. En 2020 se crearon ocho organizaciones de fact-checking en Brasil para combatir la desinformación y para el 2022 se planea realizar el “Plan 10-20-60” que cuenta inicialmente con 10 minutos para detectar la información, 20 minutos para formar un plan y, 60 minutos para anular o reducir la noticia.

Ernesto Fernández Polcuch, hizo referencia al derecho a la información establecido en la Declaración Universal de Derechos Humanos y en el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) Nº16 para el 2030, señalando que “la desinformación no es una novedad, pero sí la velocidad con la que se propaga”. Además, señaló la importancia de los medios independientes y los periodistas para combatir la desinformación. Por último, señaló que la información falsa se cruza con la información científica, porque no se logra entender los procesos de la ciencia. De esta manera, no se logra distinguir entre información falsa o verdadera.

Carmen Moreno, por su lado, mostró las acciones que UNESCO ha realizado para combatir la desinformación en el contexto electoral. A través de un estudio se identificaron cuatro tipos de respuestas: identificación de la desinformación, apoyo al público que es blanco de desinformación, respuestas dentro de la producción, así como distribución de la desinformación que se da en las instituciones primarias en el ámbito de comunicación y; atención a los productores y distribuidores. Asimismo, UNESCO ha establecido alianzas con iniciativas como Perú Check, Amallulla, Verificador de la República y el Comité Técnico de Fact Checking del JNE.

Finalmente, Maria José Lira comentó los esfuerzos que desde Hiperderecho se están llevando a cabo. Esta organización sin fines de lucro busca otorgar las herramientas legales para poder generar respeto hacia los derechos personales y humanos. Específicamente desde el proyecto de datos personales y elecciones se busca conocer cómo se están utilizando los datos personales para generar burbujas o canales de desinformación. El enfoque de Hiperderecho es tratar de empoderar a las personas que reciben constantemente información falsa en redes sociales, correos personales, entre otros. Se busca empoderar con respecto a sus derechos ARCO. Estos últimos se refieren a los derechos que cada individuo posee para acceder, rectificar, cancelar y oponerse a su uso.

Al Foro se conectaron cerca de 300 personas vía Zoom y miles de personas lo han seguido vía streaming en la página oficial en Facebook de D&D Internacional – Democracia Digital y del JNE. Podrá apreciar la transmisión en el siguiente enlace: https://fb.watch/5Rbydc4teu/

Asimismo, el Foro Internacional se transmitió a tiempo real vía Twitter, empleando los hashtags: #DemocraciaDigital y #CicloElectoral.

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